"Puedo ayudar a los pequeños empresarios"

Judith Morán

Problemas con la calidad de sus productos, dificultades con los empleados, desconocimiento acerca de si obtienen ganancias o sólo pérdidas son algunos de los síntomas que enfrentan las micro y pequeñas empresas, que son 99 por ciento de las empresas que hay en México de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI). Estos problemas pueden llevar a las empresas a su cierre definitivo.

Samara Ochoa Torres estudia Administración de Empresas y Emprendimiento. Durante el semestre de Primavera fue parte de los alumnos del ITESO que, dentro del Proyecto de Aplicación Profesional (PAP) "Consultoría en MYPE", han realizado estudios y diagnosticado a micro empresas de Jalisco para atacar sus dolencias más urgentes y ayudarlas a sobrevivir.

De acuerdo con datos del Fondo Jalisco de Fomento Empresarial (Fojal), 68 por ciento de las pequeñas y medianas empresas en el país no llegan a cumplir ni los dos años y en Jalisco esta mortandad aumenta a 85 por ciento.

En el PAP, Samara ha adquirido experiencia y ha aprendido cómo puede ayudar a los pequeños empresarios. Ahora se sabe más capaz de proponer herramientas que prolongarán la vida de este tipo de negocios y pueden servirles para crecer.

"Necesitan ayuda y hay muchísimo que hacer en esa parte, y aunque no tenga mucha experiencia sé que puedo investigar, proponerles algo que a lo mejor ellos, por tiempo, no pueden hacer o que a lo mejor no saben hacer", señala.

La mayoría de los empleos en México los generan las micro y pequeñas empresas, pero su alta mortandad genera inestabilidad en el mercado laboral, señala Laura Navarrete, jefa del Centro Universidad Empresa (CUE), el cual tiene diversos programas para intervenir en este ámbito, uno de ellos es el PAP "Consultoría en MYPE".

Navarrete comenta que la universidad decidió incidir en este sector con el objetivo de generar, conservar y mejorar los empleos que vienen de las MYPES, como una respuesta directa al compromiso social definido, que es una de las Orientaciones Fundamentales del ITESO.

"Lo que hacemos desde el centro es estar, preferentemente, con micro y pequeñas empresas que además estén en condiciones vulnerables o de desarrollo bajas, por eso es tan retador para los alumnos", dice.

La jefa del CUE añade que se trata de que los estudiantes de Administración de Empresas y Emprendimiento, Ingeniería Civil, Ingeniería Industrial y Mercadotecnia, entre otros programas de licenciatura, se desenvuelvan en un escenario empresarial "pero con poco dinero y muchos problemas, entonces los chicos están retados a buscar alternativas y mejoras de bajo costo".

En todos los casos un equipo multidisciplinario, que incluye estudiantes de distintas carreras, acude a una de las empresas que están inscritas en el programa a hacer un diagnóstico junto con un consultor del CUE. "Vemos cómo está la empresa por dentro y su entorno, se le hace un estudio, un análisis y con base en eso se presentan propuestas de mejora", detalla Samara.

Navarrete afirma que los estudiantes llegan a negocios donde no tienen manera de saber si están teniendo ganancias, no conocen su mercado o tienen problemas con su producto. "Cada empresa tiene un problema único, nosotros decimos ‘le duele todo, es micro, pero ¿qué es lo que más le duele ahorita para evitar que cierre y que empiece a ganar estabilidad?'", y es ahí donde se trabaja.

La primera experiencia de trabajo que tuvo Samara fue con una empresa de publicidad propiedad de un matrimonio que emplea a dos personas más. Actualmente colabora con Zener Solar, empresa que da empleo a 12 personas y se dedica a instalar sistemas de ahorro de energía para residencias y negocios por medio de paneles solares.

En el primer caso se implementaron herramientas para el control y seguimiento de clientes, se hizo un análisis financiero, de clima laboral y uno más de revisión de resultados; también se trabajó un manual organizacional y un plan comercial.

La estudiante señala que el dueño fue muy receptivo de las propuestas que le hizo el PAP.

A punto de egresar, Samara afirma que durante su colaboración en el proyecto aplicó los conceptos vistos en el aula. "Nos dieron, aparte de la experiencia, la metodología. No podemos proponer algo sin haber hecho antes un estudio profundo y saber cuál es el problema, porque tenemos que fundamentar bien las propuestas".

Ella no esperaba que la parte más difícil del PAP fuera el trabajo en equipo, en especial porque colaboró con alumnos de otras licenciaturas. El encuentro multidisciplinario ocurría por lo menos dos veces a la semana, cuando visitaban a la empresa y discutían la situación del negocio. Navarrete está al tanto del reto que implican los equipos conformados por muchas carreras, pero también de sus beneficios.

"Aprenden mucho no sólo de su área, sino de la disciplina del otro, como entender el punto de vista de un ingeniero cuando yo soy un administrador o un mercadólogo, aprenden a hacer trabajo en equipo y del trabajo bajo presión", abunda Navarrete.

El sueño de Samara es emprender, tener su propia empresa, aunque todavía no define en qué giro: "Mi pasión sería armar la estructura de lo que es la empresa y dar empleos".

La alumna señala que lo que ha visto desde su experiencia es que los emprendedores le dan mucho peso a la operación y descuidan otras áreas. "Casi siempre empiezan con una sola cosa y así tienen que ir sobreviviendo, pero desde el momento que la persona empieza, la meta debe ser tener en sintonía todas las áreas funcionales: finanzas, operación, recursos humanos y gestión".

A decir de la jefa del CUE, hay varios alumnos que aunque han concluido su paso por el PAP "Consultoría en MYPE" deciden quedarse para seguir dando asesorías gratuitas a empresas o que se han quedado a trabajar en la que les tocó colaborar.

"Aprenden mucho sobre la micro y la pequeña empresa, descubren un mundo que no conocían y eso les deja a muchos de ellos ganas de emprender", detalla.

La mayoría de las empresas que ingresan al PAP han tenido mejoras y logran sobrevivir, asegura Navarrete. "Quizá los casos más claros son de empresas que en este PAP han pasado por tres ocasiones diferentes en varios años. Como el empresario que viene y te dice ‘me ayudaste con mi empresa hace un año y gracias a eso hoy estoy haciendo esto, pero ahora necesito el siguiente escalón'", explica.